Oraciones por los jóvenes


 
Plegaria de un adolescente
Autor:


Cada día nos trae un nuevo comienzo.
Decisiones que debemos tomar.
Yo soy el único que escoge
el camino que seguiré.

Yo puedo elegir entre
el camino de la vida que lleva al gran éxito,
o viajar por el oscuro camino
que conduce a la gran angustia.

Por favor abre mis ojos, amado SEÑOR.
Que pueda ver claramente.

Ayúdame a definir lo que es correcto.
Saca lo mejor que hay en mi.

Ayúdame, Señor, a decir "No"
cuando la tentación venga a mi.

Que yo pueda mantener mi cuerpo limpio
y vivir cada día a plenitud;
y así, cuando mis años de adolescente terminen,
yo se que voy a ver que la vida se vive
de la mejor manera, Contigo,
caminando junto a mi.
Amen.
Oración por los jóvenes
Autor: Lorenzo González Kipper


¡Padre Santo! te pedimos por los jóvenes,
que son la esperanza del mundo.
no te pedimos que los saques de la corrupción
sino que los preserves de ella.

¡Padre! No permitas que se dejen llevar
por ideologías mezquinas.
que descubran que lo más importante
no es ser más, tener más, poder más,
sino servir más a los demás.

¡ Padre! Enséñales la verdad que libera,
que rompe las cadenas de la injusticia,
que hace hombres y forja santos.

Por en cada uno de ellos, un corazón universal
que hable el mismo idioma,
que no vea el color de la piel,
sino el amor que hay dentro de cada uno.

Un corazón que a cada hombre le llame hermano,
Y que crea en la ciudad que no conoce las fronteras,
Porque su nombre es universo, amistad, amor, Dios.
¡ Padre Santo! Cuida a nuestros jóvenes.
Amén.
Oración de un joven
Autor:
 
Señor, escucha mi oración; viene de un corazón joven.
Te invoco, Señor; he decidido buscar en ti ayuda.
No mires mis palabras torpes; mira mi interior empobrecido.
Alarga tus manos y aprieta entre las tuyas mis pobres manos.

No sé donde mirar cuando la sociedad me ofrece cosas contadictorias.
No sé escoger entre caminos que marchan sin encontrarse.
Me siento indeciso ante lo que es o no es esencial en la vida.
No soy capaz de hacer opciones en esta dura encrucijada.

Dame, Señor, un corazón limpio y generoso;
un corazón limpio donde el otro encuentre un espacio de libertad;
un corazón limpio donde el otro encuentre un rincón para ser acogido;
un corazón limpio donde el otro encuentre un clima para ser feliz;
un corazón limpio donde el otro encuentre un oasis donde descnsar;
un corazón limpio donde el otro encuentre una llama encendida donde
ardas tú.

Busco tu rostro, Señor, y me acojo al calor de tus manos;
busco sentirme seguro contigo y que nada me falte a tu lado;
busco la fuerza y el poder de tu Espíritu de Vida,
para que aliente los pasos de mi camino hacia tu casa.
Mi corazón tiene hambre y sed de ti
y quiere saciarse con tu presencia
Sé para mi, Señor, la roca firme en quien me apoyo cada día
y dame la seguridad de sentirme amado por tu corazón de Padre.

AMEN.
Oración de los Jóvenes
Autor: 


Señor Jesús,
que has llamado a quien has querido,
llama a muchos de nosotros
a trabajar por tí, a trabajar contigo.
Tú que has iluminado con tu palabra
a los que has llamado,
ilumínanos con el don de la fe en Tí
Tú que los has sostenido en las
dificultades, ayúdanos a vencer nuestras
dificultades de jóvenes de hoy.
Y si llamas a alguno de nosotros,
para consagrarnos todo a Tí,
que tu amor aliente esta vocación
desde el comienzo y las haga crecer
y perseverar hasta el fin.
Así sea
Oración de los Novios
Señor que eres amor, y fuente de todo amor, Tú que conoces el corazón de los jóvenes, Tú has puesto en nuestro corazón la capacidad de amar y ser amado, Tú sabes que las pasiones hacen olvidar el verdadero sentido del amor y que tenemos que luchar para conservar un corazón puro y amante.
Concédenos, no envilecer el amor, haznos comprender todo el egoísmo que se esconde a veces en esta palabra, danos un amor limpio y sencillo, enséñanos la dignidad del amor.
No permitas que jamás profanemos en el pensamiento, en el corazón, en el cuerpo, este don de vida que nos has confiado, bendice y purifica nuestro amor para que, si es tu voluntad, algún día lleguemos a ser esposos y padres.
Amén.
Oración del joven por ella
Tú sabes, Madre mía de Guadalupe, que en mi juventud nueva,
Ha nacido en mi frente una estrella.
Y por eso…
Hoy vengo a pedirte por ella.
Por aquella muchacha que ha de ser mi esposa.
Guárdala en tu regazo pura y bella,
libre del cieno inmundo.
Yo en cambio:
Te prometo conservarme con tu ayuda
digno de ella.
Ser luminoso, como una antorcha,
limpio como una estrella.
Amén.

Oración para ser un buen estudiante
Señor, recuérdame con frecuencia, la obligación que tengo de estudiar.
Hazme responsable:
Que santifique mi trabajo de estudiante.
Que prepare bien mi misión en la vida.
Que sepa agradecer el privilegio de poder estudiar.
Que me capacite a conciencia.
Que haga rendir mi juventud.
Que haga una buena sementera en mi inteligencia.
Dame humildad para echarme en cara la negligencia,
con que cumplo a veces mis tareas.
Dame valentía y constancia para aprovechar
todos los instantes en el estudio.
Enséñame a estudiar con método,
a leer con reflexión, a consultar a los que saben más
para, el día de mañana, ser útil a mis hermanos
y un verdadero dirigente de la humanidad.
Amén.

Oración de la joven en sus quince años
Señor Dios, creo en ti con todas las fuerzas de mi ser y por eso te ofrezco mi juventud: guía mis pasos, mis acciones, mis pensamientos. Concédeme la gracia de vivir tu Mandamiento nuevo, para amar a mis hermanos por ti.

Padre, que tu gracia en mí no resulte vana, te lo pido por Jesús, tu Hijo y mi Salvador.

¡oh Santa María de Guadalupe, Madre mía! Ante ti presento la ofrenda de mi ser al Señor, sé para mí el modelo de mujer fuerte, toma mi corazón y hazme digna hija de Dios.
Amén
Oración del joven por sus padres
Señor, esta vida joven, que yo siento bullir en mi sangre, viene de mis padres, tú les comunicaste tu fuerza creadora y yo vine al mundo, los días van pasando y yo encuentro mayor energía en mi alma y en mi cuerpo, mientras veo a mi padre que se va gastando en el trabajo.
Este trabajo, Señor, ha hecho el milagro de mi juventud, los días van pasando y yo encuentro mayor gozo de vivir en mi alma y en mi cuerpo, mientras veo a mi madre que se va consumando por el cuidado de sus hijos.
Es esa solicitud, Señor, ha hecho el milagro de mi alegría. Ellos me han enseñado a amarte y a tenerte por amigo recompénsalos tu mismo, Dios todopoderoso, todo lo que han hecho por mí consérvalos jóvenes de alma, sé tú su consuelo. Y extiende sobre nuestra familia tu mano poderosa para que, unidos, vayamos pasando de esta casa a la casa que nos has preparado en el cielo.
Amén.

Oración del joven adolescente
¡Señor! Te llamo desde mi soledad...
para los mayores a veces soy "una cosa cualquiera"
para mi mismo, "un enigma", ¡Que edad la mía!
río locamente y lloro al instante.
Me acobardo y ambiciono, amo y odio,
no comprendo la vida, ni me comprendo a mi mismo.
Y los mayores tampoco comprenden mi situación,
a ti, que fuiste adolescente, ofrezco mis alegrías,
mis ilusiones.
Mis dudas, mi dolor, mis primeros fracasos.
dame tu luz, tu gracia y tu amor
los necesito. ¡Tu luz!
para ver claro mi camino, mi futuro, mis posibilidades, mi limitación.
Amén.

LA ORACION DE UN JOVEN
Autor:


Soy joven, Señor, y quiero vivir con fuerza y alegría;
soy joven y quiero estrujar mi vida y llegar hasta el fondo;
soy joven y, la verdad, Señor, no sé lo que es vivir a veces;
soy joven y busco caminos, aunque no he encontrado el sendero cierto.
Tú amas la vida, señor Jesús, y quieres al joven en pie, firme;
amas la vida y has roto las ataduras de la muerte, resucitando;
tienes Palabras de vida eterna para el corazón del hombre,
y le has dado el pan de vida para que camine con valor.

Señor de la vida: quiero vivir desde el centro de mi ser.
Señor de la vida: quiero ser feliz y mantener mi dignidad,
Señor de la vida: quiero enraizar mi vida en ti, que eres Amor.

Yo sé, Señor, que hay cosas que matan y llevan a la tumba;
yo sé que cuando vivo mi egoísmo con rabia y desenfreno, me estoy
muriendo;
yo sé que cuando me entrego a la evasión del juego, estoy muriendo;
yo sé que cuando huyo en alas de la velocidad, estoy muriendo;
yo sé que cuando vivo de cosas, de objetos... ¡me estoy muriendo!
Quiero vivir, Señor: hacer de la verdad el camino para mis pasos.
Quiero vivir, Señor: hacer del amor limpio la norma de mi conducta.

Quiero vivir, Señor: hacer de la libertad espacio para mi búsqueda.
Quiero vivir, Señor: hacer del servicio la constante de mi vida.
Quiero vivir, Señor: hacer de la reconciliació n un camino de paz.
Quiero vivir, Señor: hacer de la esperanza una fuerza hacia adelante.
Quiero vivir, Señor: hacer de la oración un lugar de encuentro
contigo.
Quiero vivir, Señor: hacer de la justicia un camino hacia el hermano
herido.
Quiero vivir, Señor: hacer de la humildad la base de cuanto soy.
Aquí me tienes en busca de bien y la aceptación de tus mandatos.
Aquí me tienes en lucha contra el mal y en decisión de vivir el bien.
Aquí me tienes en tensión con mi propia vida, con mi corazón.
Aquí me tienes con ganas de ser auténtico, sencillamente yo.
Aquí me tienes junto a ti, Señor Jesús, Señor de la VIDA.
AMEN


Oración de un joven.
Autor:  P. Zezinho

Oye, Jesús:
Yo casi nunca recé por mi grupo juvenil.
Ultimamente las cosas
no están yendo muy bien
debido a unos chismecitos que surgieron
y que uno no supo evaluar.

Estamos afectados
por una serie de problemitas,
y lo que es peor,
no sabemos enfrentar todo eso con caridad.
Ellos son buenos, Jesús,
pero nuestra inexperiencia
hace que las cosas se precipiten.
Ha habido peleas, chismes,
noviazgos apresurados e inmaduros,
conversaciones poco convenientes,
rebeliones innecesarias
y nuestra comunidad,
que iba tan bien,
está en una época de retroceso.
Eso no es nada agradable para
Ti que contabas con nosotros.
Y creo que aún nos queremos.
Nos queríamos mucho todos
pero está ocurriendo una serie de cosas
que no tendrían por qué ocurrir.
No tendrían por qué ocurrir en absoluto.
Ya hemos intentado
todos los trucos de reunión de grupo,
de dinámica, de creatividad
y qué sé yo qué mas.
Creo que lo que está haciendo falta eres Tú.
Vine a pedirte que Tú hagas
lo que esas técnicas no pueden lograr.
Ayúdanos porque va a ser terrible
comenzar todo de nuevo.
Tú merecías algo más que una derrota
como ésta.
A ver si nos das una manita, porque sin Ti
somos una porción de ceros juntos.
No valemos gran cosa,
para no decir
que somos una perfecta negación.
Adiós y buena suerte
para nuestra tentativa de progreso
y unión del domingo próximo.