8vo. Sábado



Lectura: San Juan 19: 1-8
Pilato tomó entonces a Jesús y mandó azotarlo. Los soldados trenzaron una corona de espinas, la pusieron en la cabeza de Jesús y lo vistieron con una capa de color rojo oscuro. Luego se acercaron a él, diciendo, "¡Viva el Rey de los judíos!" Y le pegaban en la cara. Pilato volvió a salir, y les dijo: "Miren, aquí lo traigo, para que se den cuenta de que no encuentro en él ningún delito." Salió, pues, Jesús, con la corona de espinas en la cabeza y vestido de aquella capa de color rojo oscuro. Pilato dijo, "¡Ahí tienen a este hombre!" Cuando lo vieron los jefes de los sacerdotes y los guardianes del templo, comenzaron a gritar: "¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!" Pilato les dijo: "Pues llévenselo y crucifíquenlo ustedes, porque yo no encuentro ningún delito en él." Las autoridades judías le contestaron, "Nosotros tenemos una ley, y según nuestra ley debe morir, porque se ha hecho pasar por Hijo de Dios." Al oír esto, Pilato tuvo más miedo todavía.

Virtud.- Conformidad.

Práctica.- Soportad sin inpacientaros los temperamentos difíciles de las personas que os rodean. Sufrid la tristeza, tentaciones y enfermedades sin quejaros ni contarlas a otros a fin de moverlos a compasión.

Jaculatoria.- Oh María, vida y esperanza mía: ¿Qué será de mí si Tú me abandonas?.

Recordatorio: Sor María Romero Meneses: Días de sol y días de lluvia: Días en que el alma está angustiada y días en que rebosa entusiasmo, todos son igualmente provechosos para el perfeccionamiento personal si se saben emplear bien ( F II 6 ).

ORACIÓN DE OFRECIMIENTO DEL OCTAVO SABADO

Oh Madre de Dolores, por aquel tormento atroz que traspasó tu corazón cuando viste a tu Jesús, Rey de la gloria, hecho rey de burla y de dolores, coronado de espinas y de ignominia, expuesto a la diversión del pueblo. ¡Ay! Amado Jesús rodea de aquellas espinas mi inteligencia y mi corazón para que nunca te ofenda con pensamientos ni defectos; concédeme pureza de mente, y recta intención en todas mis obras.

ORACIÓN para ANTES DE LA COMUNION
Oh Salvador mío y Dios mío, por tu nacimiento, pasión y muerte y por tu gloriosa resurrección, concédeme estas gracias ( se piden ).
Te las pido por el amor de este misterio en honor del cual recibiré tu Carne y Sangre divina. Te las pido por tu Corazón Sacratísimo, por tu Santísima Madre Inmaculada, por tu Santísimo Nombre, oh Jesús, mío, por el que has prometido toda suerte de gracias.

ORACIÓN A LA SANTÍSIMA VIRGEN
Oh Reina, gloriosa del Santísimo Rosario, Hija del Eterno Padre, Madre del Divino Hijo y Esposa del Espíritu Santo, por tus goces y dolores, por tus glorias y por los méritos de este misterio en honor del cual ahora me acerco a la Santa Mesa, te pido con toda mi alma me concedas estas gracias, Angel de mi guarda, acompáñame y sugiéreme los afectos más santos, más humildes y más puros que me sean posibles.

ORACION PARA DESPUES DE LA COMUNION
Oh Salvador mío y Dios mío, por tu nacimiento, pasión y muerte y por tu gloriosa resurrección, concédeme estas gracias ( se piden ).
Te las pido por el amor de este misterio en honor del cual me he acercado a la Santa Mesa. Te las pido por tu Corazón Sacratísimo, por tu Santísima Madre Inmaculada, por tu Santísimo Nombre, oh Jesús, mío, por el que has prometido toda suerte de gracias.

ORACIÓN A SAN JOSÉ
Oh Padre Augusto de Jesús y Padre nuestro San José, a quién el Eterno Padre confió su querido Hijo, el Espíritu Santo; su castísima Esposa; y la Madre Virgen, todos los tesoros de su virginidad. Tú que tanto puedes con el Corazón de Jesús y el de María, tienes que concederme estas gracias que tanto deseo.

ORACIÓN A JESÚS CRUCIFICADO
Heme aquí, mi amado y buen Jesús, que postrado en vuestra santísima presencia, os ruego con el fervor más vivo que imprimáis en mi corazón los sentimientos de Fe, de Esperanza, de Caridad, de dolor de mis pecados y de propósito de no ofenderos más; mientras yo con todo el amor y con toda la compasión considero vuestras cinco llagas, comenzando de lo que de Vos, oh Dios mío, dijo el Santo Profeta David: Traspasaron mis manos y pies y contaron todos mis huesos.

( Según la intención del Sumo Pontífice y para ganar la indulgencia plenaria:
Padre Nuestro...,
Dios te Salve María...,
Gloria...).
Contemplando una imagen de Jesús Crucificado